8 oct 2010

Funciona No Funciona

Entre el público común se empieza a extender la peculiaridad de opinar sobre todas las cosas habidas y por haber con una rotundidad pasmosa. Tener el medio para que te oigan se convierte en capacidad de comunicar. El ligero conocimiento que tiene nuestra generación sobre casi todas las cosas hace a muchos pensar que tiene un conocimiento amplio, que le da la capacidad de juzgar y sentenciar. Hace años, para emitir una opinión rotunda tenías que tener un conocimiento extenso, y si no lo tenías, eras un garrulo.

Toneladas de gente hablan sin saber, sin ser honestas, se meten a juzgar los aspectos más tecnicos de lo que leen y ven sin pararse a dejar sentir y ver si disfrutan o no lo que tienen en sus manos. Si les hace padecer y sentir. Si les hace estremecerse. "Una película compleja con un plano secuencia memorable y un uso de la fotografía conmovedor". Sinceramente, vete a la mierda.

Gente que tirando de las bases de lo establecido hoy, se atreve a decir "esto funciona" "esto no funciona", como si mañana no pudiese gustar, como si el público no fuese ya suficientemente extenso como para llevarte una sorpresa.

Simplemente digo que "sí funciona o no funciona" es algo que sólo puede decidir el tiempo, no una persona que actualmente sabe lo que gusta o acierta con sus productos. ¿Funciona? ¿No funciona? Lo veremos mañana.

Y si esto se va a convertir en la tónica general del espectador cabe la pregunta: ¿Tendrán que convivir los creadores con ello? ¿Cómo lo harán? Desde luego no es fácil, porque hay un abismo inmenso entre los conocimientos técnicos del público cultureta y los del público medio que acude sin pretensiones de juzgar a nadie. La solución: hacer libros increíbles como los que se hacían antes, hacer películas con mil lecturas en las que todos disfruten, y hacerlo tan bien que nadie se dé cuenta de que existen los medios técnicos.




Temporada de Series

Con septiembre llega el aluvión de series favoritas. Las que habíamos olvidado, las que estábamos esperando. Yo por mi parte ansiaba volver a ver Modern Family, pero por supuesto, hasta que no lleven 10 episodios emitidos, no empezaré a verla. El ritmo increíble que tiene, hace que una temporada sepa a poco.

Otra de las series que más me gustan es The It Crowd. Lamentablemente este genialidad sólo tiene una pega, que más corta que una película. La 4ª temporada volvió de manera increíble, regalándonos momentos tan cómicos que pocos podremos olvidar.

Y otro clásico de septiembre es The Office, que pese a la anunciada marcha de Steve Carrell, comienza con un episodio inceíble. Como siempre tirando de lo costumbrista y de las últimas tendencias en internet.

Si a esto le sumamos Cómo conocí a vuestra madre, no sé de dónde voy a sacar el tiempo para ver tooooodo lo que tengo que ver.

Sin siquiera levantarse

Eran tan ágil que marcó de chilena sin saltar. Era tan bueno, que antes de que llegase el balón, ya se estaba alejando victorioso, con paso altivo.

Aunque la otra persona no había terminado su frase, él respondió sacando un trapo sucio  muy bueno del que nadie se acordaba. Lo tenía ahí, preparado, desde hace años. Era una broma que no tenía sentido en casi ningún sitio, pero él la tenía siempre en la mente, esperando a que llegase el día en que pudiese meterla. Y esa tarde, mientras el otro empezaba a hablar, fue feliz porque sabía que habia merecido la pena la espera. Nadie comprendería cómo había sido capaz de tener semejante respuesta ingeniosa, tan rápida, tan fuera de lugar y a la vez tan acertada. Totalmente apasionante para los amantes de la respuesta rápida. Sólo un cerebro descomunal  podía trabajar de esa forma. Y esa noche, su obra de arte culminó. Fue maravilloso. Y la forma de hacer el humor cambió para siempre, el objetivo de todos ellos fue ser así de rápido, ser mejor, encontrar la forma de superarlo, pues si no lo hacían, no serían nada. Estarían muertos.

Esto es marcar de chilena... sin levantarse.